Válgame dios... eso es todo lo que pude decir cuando me enteré de que el Cybercafé al que voy seguido que está a un lado del Parque Tecnológico en la calle de Químicos lo clausuró la judicial el lúnes pasado quesque porque "se vendía droga y se descargaba porno infantil".
Lo primero no me lo esperaba aunque uno de los compañeros de mi otra chamba, el sereno Licenciado Argüeta me comenta que "La calle Químicos hace honor a su nombre, ahí vive banda bien pesada y venden cosas que ni siquiera el departamento de Toxicología de la UNAM ha clasificad".
Lo segundo ya me lo esperaba ya que el cybercafé de marras tiene un cubículo por cada computadora por lo que te da una total intimidad para ver marranadas por la red (ojo: eso yo no lo he hecho, yo solo escribo y pongo al día mi blog, que conste).
Parece que las políticas del querido y tartamudo Adalberto Madero van a ser muy impopulares desde ahora con los hackers y demás fauna cibernética.
¡Gazias pod votad pod mi!
3 comments:
Aqui en este cyber, el cual concurro no tan concurridamente, existe el ordenador 7 (solo hay 7 ordenadores), mejor conocido como la compu del rincón.
Generalmente los púberes secundinos la ocupan (casualmente en grupos de dos a cuatro). Lo más desagradable es que con todo uso del órden, pasan de uno en uno (hasta donde me ha tocado ver) al cuarto de baño de la misma instalación, tardando hasta 15 minutos por cabeza (...si, por cabeza). ¡Eso es amor al arte!
Yo leí tu carta en La Rocka.
Jaja, Marqués.
a k lugares de perdicion acostumbras a ir...
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