Mucha gente me ha preguntado de donde saqué el excéntrico y muy mamón pseudónimo de "Marqués de Topochico" en este blog les voy a explicar de donde surgió...
Para empezar, remontémonos 3 años atrás (2002), cuando estaba recién desempacadito en Monterrey de la mefítica ciudad de México, el smog defeño todavía estaba asentado en mis pulmones, utilizaba los camiones y el metro para moverme en la ciudad y expresiones regias como "feria", "jale" o "fara-fara" eran un completo misterio para mí.
Entre que me acostumbraba al asfixiante clima regio y buscaba un trabajo o "jale", decidí idear una manera de alivianar la melancolía que sentía por el D.F., por lo que a los contactos que tengo en mi cuenta de hotmail empecé a mandarles cada domingo una síntesis de lo que me pasaba en estas tierras salvajes de la carne asada, títulandola como "Las increíbles e inverosímiles aventuras del Marqués de Topochico". Esto duro un año, y, a lo largo de todo ese tiempo, varias amistades me mendaban mails diciéndome qué estaban poca madre, tanto, que una amiga llamada Gloria Reverté del extinto Foco.com, llegó a comentar que era un clásico dominical, al igual que "la misa de las diez, la pancita y las galletas de animalitos".
La mayoría de mis amistades chilangas me preguntaban de dónde carajos saqué nombre tán curiosito y finalmente les diré que lo saqué en una de las primeras fiestas que asistí en Monterrey, en donde hacían cubas con una marca de agua mineral regional que se llama "Topochico" (sacado del cerro del mismo nombre) ... algo así como la Peñafiel pero con un chingo más de gas para eructar bien ricote.
De hecho, esta marca de agua mineral, según investigaciones del departamento Pond´s ya lleva más de un siglo aquí en regiolandia (1895) y es una de las empresas de más raigambre y pedorraje de todo Nuevo León, creada por un tal Julio Randle que era concesionario de los baños termales en las faldas del cerro del Topochico o del Topo. Así que después de barajear nombres tan irreales y anódinos como Juan De Las Pitas, Don Caritino Estudillo y Picoy, el Vizconde de los Baños, Conde de Salsaverde o Teodorakis, decidí irme a lo seguro y adopté el real y muy regio nombre de Marqués de Topochico, ya que representa mi asimilación a la cultura regia (y, como muchos saben, mi bisabuelo por parte de mi padre era regio), además de que si existe un Conde de Agualeguas (cómico ranchero muy popular con los naturales de estos lares) ¿¿¿Porqué coños no va a existir un Marqués de Topochico???
Espero que con este blog haya resuelto de una vez por todas las dudas que hayan tenido y puedan tener en el futuro. Se despide de uds., por ahora, el único e irrepetible Marqués de Topochico... ¡Abur!
No comments:
Post a Comment