Thursday, August 25, 2011

Zen


Hace unos días me chuté la miniserie completa de "The Company", la cual narra la historia de la CIA través de los ojos de tres alegres compadres quienes son reclutados en la graduación de su universidad (Harvars... pinches pedorros tenían que ser) por la oscura institución para ofrecerles un puesto en la misma. El caso que en la miniserie hay un personaje que fue real llamado James Jesus Angleton (quién es representado por Michael Keaton) quien, a lo largo de la serie tenía la frase de "you must have the patience of a saint". Esta persona fue por muchos años el jefe de contrainteligencia de la CIA cuya inteligencia y celo profesional ayudó a E.U.A. a recuperar tesoros europeos de manos nazis, también sus relaciones con diversos capos de la mafia ayudó en gran medida a las realciones Italia - E.U.A. al final de la Segunda guerra mundial. Angleton era un personaje totalmente gris que se la vivía entre los pasillos de la CIA buscando, investigando y teorizando relaciones entre los enemigos de su país tales como los alemanes y más adelante, los rusos.

¿A qué viene toda esta disertación? Me explicaré, ya van como 5 meses en que solo he estado trabajando dando entrenamientos del idioma inglés, apenas sobreviviendo y he estado tomándome mi tiempo a la más pura usanza "zen" para ver qué rumbo toma mi postrera vida profesional después de mi participación en un proyecto de redes sociales de una conocida agencia de publicidad saltillense. He estado pensando y analizando mucho y poco a poco me he estado metiendo en algunos proyectos de medios comunicación, uno promete grán creatividad mientras que el otro promete gran cantidad de dinero...

Se me ha enseñado que "hay que moverse y buscar" sobre todo en cuestión de trabajo pero mi experiencia de 4 décadas ya me ha enseñado que no siempre el movimiento es lo idóneo por lo que sigo al pie del cañón, además, el mercado laboral no es el mejor y menos la situación económica mundial, por lo que espero a que salga la oportunidad justa en el momento justo cual estratega de le época de la guerra fría o maestro budista zen de la época de Sun Tzu.

Es más, siempre me ha gustado mucho más estar tras bambalinas que estar en el centro de las cosas, es más cómodo y te da más libertad de movimientos, conocer todas las triquiñuelas del sistema para así evadir sus trampas e intrigas sutilmente. Aquellos que siguen esta filosofía son los verdaderos sobrevivientes, siendo uno de los casos más sonados en la historia moderna Joaquín Balaguer, consejero del Generalísimo Rafael Trujillo y posterior presidente de la República Dominicana.

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