11:59 p.m.

Ya tiene meses que trabajo en Hispanic Teleservices, departamento de Soporte Técnico desde la tarde hasta la noche, el departamento cierra exactamente a la medianoche, aunque la hora más temida es a las 11:59 p.m., ya que si te cae una llamada a esa hora, no lo puedes cortar y tienes que atender al cliente, hasta que se vaya satisfecho y han habido veces en que sales hasta la 1 de la mañana.

En el slang de la compañía, ese es el horario del guerrero del amor o de slut, según como se le quiera ver, la mayoría de los que trabajan ahí le rehuyen como si se tratara de un "mostro" horrendo de dos cabezas, cuatro piernas y seis brazos.

Ya cuando faltan cinco minutos para la medianoche, todos fijan sus miradas en el reloj del teléfono Avaya y para aumentarle suspenso al asunto, los desgraciados muy jijos de la jijurria no le pusieron segundero, así que ya se imaginarán el divertidísimo ambiente, casi casi se puede respirar el miedo, la preocupación y el verdadero pavor a que te caiga una llamada a punto de cerrar.

A mi me ha tocado atender clientes a un minuto de cerrar y el sentimiento que me embarga es el de frustración y de ira hacia el pendejo/a que tuvo la grandiosa ocurrencia de hablar justamente en ESE miinuto y atenderlo rapido y a veces hasta enojado... sé que está mal pero caramba, como se dice por ahí: "¡Échemne una mano!".

Cuando el tecolote canta, el indio muere y cuando la medianoche cae, el técnico tiembla.